Ante la situación sanitaria que estamos viviendo, nos hemos visto obligados a adaptarnos a nuevas circunstancias, tanto en el ámbito laboral como en nuestra vida personal. La forma de relacionarnos con nuestros compañeros y familiares ha cambiado, y es que, seguir manteniendo esos vínculos es imprescindible para nuestro bienestar.
Esto, gracias al avance vertiginoso de las nuevas tecnologías, ha sido más sencillo, ya que nos han permitido acortar distancias para acercarnos a nuestros seres queridos y combatir la distancia, pudiendo llegar a los lugares más recónditos, mientras que en el plano laboral nos han ayudado a mantenernos actualizados e informados con nuestros compañeros en nuestro día a día.
Ahora, inmersos en la época más especial del año, como es la Navidad, las videollamadas se multiplican con la excusa de “felicitar las fiestas” y así comunicarnos y ver a todas esas personas con las que no podremos juntarnos. Y aunque muchas personas consideran estas fiestas únicamente como una forma de diversión y meramente comercial, la realidad es que, sea cual sea el concepto, es una oportunidad para la reflexión y tiempo de compartir en familia.
Familia de sangre, de trabajo, de amigos… diferentes, pero igual de importantes. Tenemos que cuidar y valorar a cada una delas familias que tenemos a nuestro alrededor, ya que todas ellas nos aportan cosas diferentes que nos nutren y nos ayudan a ser mejores personas.
Además, llegada esta época del año, hacemos balance echando la vista atrás, viendo pasar por nuestras mentes los diferentes momentos que componen los últimos 12 meses, desde los buenos pasando por otros no tanto, pero todos ellos nos llevan a una conclusión: dar las gracias a las personas que tenemos a nuestro lado, aquellas que nos impulsan para alcanzar nuevas metas y objetivos año tras año. Porque, como dijo alguien una vez…
“La felicidad es mejor cuando se comparte”
Cojamos la copa y brindemos por la nueva oportunidad que nos proporciona la vida y con la que podemos escribir nuestro propio libro con 365 páginas en blanco por delante. Copiemos de los más pequeños la magia e ilusión que desprenden por estas fechas.
¡Felices fiestas y próspero año nuevo!
