GENERACIÓN CENTENNIAL ¿CÓMO SERÁN LOS EMPLEADOS DEL FUTURO?

Según los datos de la Secretaría del Trabajo en México, el 75% de la población activa en 2025 será millenial.

Sin embargo, aunque en la actualidad los millenials ocupen el centro de atención de las empresas, ya existe otra generación que en breve buscará su hueco en el mundo laboral. Hablamos de los centennials o generación Z, aquellos nacidos a partir del año 1994 hasta el 2010 y que ya comienzan a prepararse para su incorporación al mercado de trabajo.

Tal y como afirma el informe Gen Z Global Workplace Expectations Study, los centennials serán los verdaderos “retadores” de las organizaciones en los próximos años. ¿Por qué?

Empezaremos por desgranar los principales anhelos y características de esta generación.

¿QUÉ CARACTERIZA A LA GENERACIÓN CENTENNIAL?

Los miembros de esta generación difieren mucho de sus antecesores millenials, Por ello, aquellas empresas que quieran atraer el mejor talento de la generación Z en los próximos años, han de conocer bien sus principales características:

1. Sienten pasión por la tecnología. Un estudio realizado por el INSEAD Emerging Markets Institute, compara las diferencias entre las tres generaciones X (nacidos entre 1968 y 1981), Y (entre 1982 y 1994) y Z (a partir de 1995). En dicho estudio, los centennials destacan sobre el resto por su interés por el mundo de la tecnología y la realidad virtual. Por ello, los centennials buscarán trabajar en aquellas empresas más punteras e innovadoras en las que la tecnología forme parte de su rutina diaria.
2. Ponen el foco en la formación continua. Aprender constantemente y “reeducarse” es uno de los factores que más importancia tiene para los miembros de esta generación Z, según recoge el estudio Gen Z Global Workplace Expectations Study. Esto supone que la empresa ha de garantizar una formación continua (en línea o presencial), flexible y hecha a medida del empleado centennial.
3. Buscan la diversidad. Esta generación está acostumbrada a tener entre sus amigos a personas de diferentes nacionalidades, gustos e intereses. Por ello, serán más propensos a buscar la diversidad en los grupos de trabajo.
4. Son autónomos y rebeldes. Así los define el informe Insights and Observations about Generation Z. No temen cuestionar a las jerarquías y el concepto de éxito que defienden las empresas actuales, más enfocadas en el cumplimiento de objetivos y tareas. Al igual que los millenials, la generación Z manifiesta rechazo a las políticas rígidas, pero además buscarán autonomía para poder personalizar su forma de trabajar, defendiendo ante todo la flexibilidad y el equilibrio entre su vida personal y laboral.
5. Quieren sentirse escuchados. Un empleado de la generación centennial desea que se escuchen sus ideas y opiniones y sobre todo, valora la honestidad de sus líderes, una cualidad que considera la más importante para ser un buen líder.
6. Apuestan por empresas con vocación social. La mayoría de los centennials nacieron en una época de recesión económica, por ello tienen una menor aspiración salarial que los millennials, quienes si vinculan el éxito con el poder económico. Los centennials dan más importancia al prestigio social de su empresa, es decir, prefieren trabajar en organizaciones que inviertan y participen en causas sociales en fin del beneficio colectivo.

En resumen, la generación Z viene pisando fuerte y está dispuesta a cambiar la forma de trabajar actual de las empresas. Por ello, solo aquellas organizaciones que trabajen con tecnologías innovadoras, que no tengan estructuras rígidas de liderazgo, que escuchen a sus empleados y que aporten formación continua, serán las elegidas por el mejor talento centennial.

Las “soft skills” más demandadas por las empresas que buscan el mejor talento

A medida que los entornos de trabajo cambian muy rápidamente fruto de la globalización, la tecnología y la diversidad laboral, los empleados han de estar preparados para enfrentarse a estos cambios. Por esta razón, las empresas demandan determinadas habilidades en los profesionales que son denominadas Soft Skills o “habilidades blandas”, una serie de características personales que nos hacen destacar y adaptarnos al entorno para llegar a ser los mejores profesionales.

Todas aquellas capacidades que potencien la motivación, la empatía, la capacidad de adaptación o la visión de negocio, son muy valoradas en los trabajadores de una compañía, y por tanto, son habilidades que se han de entrenar, aprender y mejorar con el tiempo y la experiencia laboral.

Hard Skillis vs Soft Skills

Antes de descubrir cuáles son las soft skills más demandadas actualmente en el mercado del talento, primero debemos diferenciar entre “hard skills” y “soft skills”:
Se denominan “hard skills” a los conocimientos específicos para un puesto. Estas habilidades, que se basan en los conocimientos desarrollados y aprendidos a lo largo de nuestros años de formación y de experiencia laboral, eran las más demandadas en los procesos de selección tradicionales. Sin embargo, se ha comprobado que tener determinados conocimientos técnicos, no siempre es sinónimo de poder desarrollarlos correctamente en un puesto de trabajo.

Las soft skills, por el contrario, se refieren a la personalidad, las aptitudes, la motivación, la manera de relacionarse con los compañeros y de desenvolverse en el puesto de trabajo… en resumen, se trata más de habilidades sociales e interpersonales, que del expediente académico y la trayectoria profesional de un empleado.

¿Cuáles son las soft skills más valoradas?

Según el informe Experiencia del empleado 2018 de Udemy, las soft skills más valoradas por las empresas son:
• Gestión de conflictos. Según las últimas estadísticas, en Estados Unidos, se destina una media de 2,8 horas semanales a resolver este tipo de conflictos laborales. Tener la habilidad de gestionarlos adecuadamente es una de las capacidades blandas más demandadas por las compañías.
• Inteligencia emocional. La capacidad de un trabajador para manejar y expresar sus emociones, así como para empatizar con las emociones de sus compañeros, marca una notable diferencia con el resto. La razón principal es que la inteligencia emocional puede tener un impacto directo en el rendimiento laboral de los trabajadores, dado que está relacionado con una mejor salud mental y física y una mayor motivación y productividad.
• Trabajo en equipo: Es una de las soft skills más demandadas, ya que significa que la persona trabajará en favor del grupo y no solo por sus propios intereses.
• Habilidades de comunicación. Según Google en una de las conclusiones de la investigación Project Oxygen, ser un buen comunicador es una de las ocho habilidades fundamentales de un buen trabajador o líder. Una comunicación directa, clara, y cuidada (tanto verbal como escrita).
• Orientación al cliente, de cara a satisfacer las demandas y requisitos de los clientes de la empresa.
• Gestión del cambio. Debido a la transformación digital y la automatización del trabajo, empresas y empleados deben estar preparados para saber adaptarse rápidamente a los cambios.
• Productividad personal. Esto significa que el trabajador es capaz de evitar interrupciones de sus compañeros, no se distrae fácilmente y no se siente abrumado por los cambios constantes en el trabajo.
• Manejo del estrés. El estrés sostenido en el tiempo provoca agotamiento físico, mental y emocional de los empleados. Mantener un bajo nivel de estrés es una de las habilidades blandas más deseadas por las compañías.

Reconocer el valor de las Soft Skills de los empleados es una de las grandes decisiones que están tomando las empresas de éxito, ya que éstas son conscientes de que las habilidades personales de los profesionales juegan un papel principal para aumentar la productividad, mejorar el ambiente laboral y ser realmente eficaces en su trabajo.

Reclutamiento 4.0, las nuevas técnicas de selección de las empresas que buscan el mejor talento.

En la actualidad, uno de los grandes retos para las empresas es atraer el mejor talento de una manera rápida y eficaz. Sin embargo, hoy contamos con nuevas tecnologías y plataformas que han ayudado a optimizar los procesos de selección y a captar a los mejores profesionales.

Pero además de las ventajas que aporta la tecnología, el reclutamiento 4.0 pone el foco en lo “humano”. Las empresas de éxito buscan la satisfacción del empleado una vez que se incorpora al puesto y se centran en mantener una excelente reputación digital. Esto último es fundamental para aquellas empresas que pretendan atraer y enamorar a los futuros empleados y que éstos terminen convirtiéndose en embajadores de la marca.

Los nuevos métodos de selección de personal del Reclutamiento 4.0

• Una de las técnicas de selección de personal más consolidadas en el reclutamiento 4.0 es el uso de redes sociales profesionales como LinkedIn. Según un informe de Randstad, el 65% de las empresas encuentran a sus candidatos a través de ellas.
• Gamificación: El uso de videojuegos y juegos de rol se han postulado como herramientas muy eficaces para descubrir habilidades y capacidades entre los candidatos. Entre sus ventajas, convierte el proceso de selección en algo dinámico y divertido. También hace que el proceso de selección sea mucho más objetivo, debido a que la elección del candidato final no va a contar con aspectos subjetivos o personales.
• Inbound Recruiting: es una metodología que aplica técnicas de Marketing Digital para seleccionar profesionales. Frente a los procesos tradicionales de selección en los que la empresa espera a que los candidatos se inscriban en sus ofertas activas, el Inbound Recruiting se centra en atraer al candidato ideal para la empresa haciendo que este se “enamore” de ella.
• Networking on line: La celebración de eventos virtuales de masterclass, formación o coaching permite a las compañías generar contactos de posibles candidatos para futuras vacantes en la empresa.
• Small data. Permite localizar, a través de algoritmos, a los candidatos más idóneos para un puesto de trabajo concreto.
• Una de las grandes innovaciones en materia de selección de personal es la nanotecnología. Entre otras utilidades, la nanotecnología sirve para conocer cómo reacciona el cerebro del candidato ante determinadas situaciones y estímulos que podría encontrarse en su día a día.

Ventajas del reclutamiento 4.0

Sin duda, uno de los aspectos más positivos de este tipo de selección, es que más allá de los años de experiencia, los títulos, etc, el reclutamiento 4.0 le da una gran importancia a competencias, aptitudes y habilidades, lo que permite dar una oportunidad a los empleados para desarrollarse dentro de la compañía.

Por otro lado, este tipo de técnicas ahorra mucho tiempo a los profesionales de recursos humanos, que de esta forma tienen acceso a un mayor número de candidatos y a una mayor segmentación de estos, lo que facilita la selección de aquellos candidatos idóneos para el puesto.

Sin duda, los avances de la tecnología son imparables, incluso para el sector de la selección de personal, una de las áreas de nuestra sociedad que más se ha transformado en los últimos años gracias a ella.

¿Con qué nos sorprenderá en el futuro el reclutamiento 5.0?

Consejos para evitar el síndrome postvacacional

Falta de motivación, sueño excesivo, fatiga mental… son solo algunos de los síntomas más frecuentes del llamado “síndrome postvacacional”.

Según un estudio realizado por Bizneo HR, 4 de cada 10 trabajadores sufrirán depresión al volver a sus trabajos después de las vacaciones. Sin embargo, tanto la empresa como el propio empleado pueden poner en marcha medidas que eviten que la situación vaya a más y hacer que la vuelta a la rutina no resulte tan costosa.

Antes de enumerar las medidas que se pueden adoptar para paliar este síndrome, es necesario aclarar por qué se presenta después de las vacaciones.

¿Por qué se sufre este síndrome postvacacional?

Lo primero que hay que tener en cuenta es que el síndrome postvacacional es un proceso adaptativo que se inicia con la vuelta a la rutina, pero que también desaparecerá con el tiempo.

Aunque no existe un perfil concreto de trabajador al que le afecte este síndrome de forma específica, lo que sí que podemos identificar son algunas características habituales en el entorno laboral de éste que provocan una difícil vuelta a la rutina:

• Falta de resiliencia: Los trabajadores que no cuentan con la capacidad de gestionar bien los cambios en su vida y afrontar las dificultades que ésta presenta, suelen padecer depresión postvacacional más a menudo.
• Períodos vacacionales largos:Los trabajadores que dedican más de 3 semanas a sus vacaciones son más propensos a contraer el síndrome. La razón es que para que una acción se convierta en hábito se necesitan a 21 días para implementarse en nuestra rutina.
• Ambiente laboral negativo: Aquellos empleados que regresan a un entorno de trabajo negativo con una mala relación tanto con sus jefes como con sus compañeros, son más susceptibles a padecer este síndrome postvacacional.
• Desmotivación: Los trabajadores que no se sienten identificados con su empresa ni se sienten motivados en su puesto de trabajo, obviamente tenderán a sufrir este síndrome.

Medidas para evitar el síndrome postvacacional

Todos sabemos que la vida laboral implica responsabilidades y exigencias. Pero también es cierto que podemos gestionar mejor esta vida diaria, sin necesidad de esperar a poder tener vacaciones para disfrutar.

Partiendo de esta premisa, el empleado puede tomar algunas medidas durante los días de retorno a la actividad laboral que ayudan a atenuar el síndrome postvacacional:

• Vuelta al trabajo sí, pero de forma gradual: Tras haber disfrutado de varios días seguidos de desconexión cambiar los biorritmos no es nada sencillo, por ello es importante que la vuelta al trabajo se haga de forma gradual. Los expertos aconsejan ir realizando primero las tareas más sencillas para, de forma progresiva, ir incrementando el volumen de trabajo.
• Hacer ejercicio y adoptar hábitos saludables: Practicar deporte aumenta la energía y la capacidad de concentración en el trabajo. Además es una actividad perfecta para liberar endorfinas y mejorar el estado de ánimo. Al comienzo solo hacen falta 30 minutos diarios de ejercicio físico para ir readaptando la rutina.
• Establecer pautas de tiempo libre: Poner orden a las tareas pendientes y establecer un tiempo de disfrute personal debe ser intocable, pues debe haber un equilibrio entre lo laboral y la vida personal para poder ser más eficientes en el puesto de trabajo.
• Actitud positiva: Mantener una actitud positiva es fundamental para superar el periodo de adaptación a la rutina del trabajo.
• Programar nuevos retos y metas para llegar a cumplir todos nuestros objetivos tras las vacaciones es una forma de afrontar la vuelta con un plus de motivación.

En realidad, el origen más importante del síndrome postvacacional está marcado por la falta de motivación laboral y nuestra forma de vida. Para mejorar estos aspectos es necesario mejorar nuestros hábitos, no solo en vacaciones, sino durante el resto del año.